Escobi ha introducido un nueva máquina calibradora de calabacín (aunque también sirve para pepino). El gerente de Frutas Escobi, Gabriel Escobar Rubio, afirma que “la finalidad de implantar un calibrador “más sofisticado y moderno” es “mayormente la reducción de costes, que es vital, y el aumento de la producción”. Se estima que la nueva calibradora suponga un ahorro en costes del 15%.

Esta calibradora de 28 metros de largo consta de dos líneas, seis módulos de confección con 13 salidas, capacidad para 48 envasadoras, básculas integradas en cada puesto de trabajo, dos salidas para cajas confeccionadas y hasta 10 puestos de trabajo para alimentación del calibrador.

Para la evacuación de los envases, el aparato cuenta con dos cintas transportadoras para cajas de campo, dos cintas para cajas confeccionadas y dos cintas para la retirada del destrío.